A los niños K-12 se les enseña que sus cuerpos no tienen nada que ver con su "identidad de género" y que los niños en realidad pueden ser niñas y las niñas en realidad pueden ser niños. Los padres que tienen puntos de vista biológicamente precisos sobre el sexo y el género y, por lo tanto, se niegan a capitular ante la medicalización de los cuerpos sanos de sus hijos, son socavados y vilipendiados como "odiosos, tóxicos, abusivos y transfóbicos". Los senos sanos de las adolescentes y los penes y testículos sanos de los hombres jóvenes se extirpan en procedimientos experimentales que dañan irrevocablemente su sexualidad y fertilidad. Los terapeutas de género y los médicos mienten a padres e hijos, afirmando que los bloqueadores de la pubertad y las hormonas del sexo cruzado son completamente reversibles y no dañan el cuerpo y el cerebro de los jóvenes.

 Transición de niños  es el fruto de una investigación profunda, amplia y terrorífica sobre el retorcido mundo del transexualismo infantil. Brewer y Keffler han aplicado sus habilidades analíticas y de pensamiento crítico para desenmascarar esta bestia de ideología, produciendo este libro completo e innovador.